El Papa dejó una rosa blanca en la lápida de su predecesor
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Fieles
tomaron con sorpresa la visita del Sumo Pontífice.
David
Mora, periodista
Luego
de visitar el Santuario de Nuestra Señora del Buen Consejo, la tarde de este
sábado 10 de mayo; sólo dos días después de su elección, el Papa León XVI fue a
la Basílica Santa María La Mayor a orar ante la Salus Populi Romani y dedicó
unos minutos para elevar una plegaria ante la tumba de su predecesor, el Papa
Francisco, donde dejó una rosa blanca en su lápida.
A
eso de las 7 de la noche (hora de Roma), el Santo Padre llegó a la plaza de la
Basílica, donde los fieles se estaban preparando para rezar el Santo Rosario,
cuando todo fue interrumpido por una ovación de aplausos, gritos y las cámaras
de los celulares listas para capturar el momento. León XIV saludó a los fieles
desde la ventana del vehículo que lo transportaba y luego ingresó por la puerta
lateral.
Más
de cien fieles corrieron hasta el interior de la Basílica Papal mariana para
esperar el paso del Sumo Pontífice, quien fue saludando a varias personas a su
paso por la nave central. Tal y como lo acostumbraba Francisco, León XIV dejó
un ramo de rosas ante la imagen de la Madre de Dios; que según la tradición,
fue pintada por San Lucas.
El
líder de la Iglesia Católica iba acompañado por el arcipreste de la Basílica
Santa María La Mayor, el Cardenal Rolandas Makrickas, y el Cardenal Ángel Sixto
Rossi, saludó a algunas religiosas cuando salió de la capilla y procedió a
visitar la tumba de Francisco.
El
obispo de Roma también se detuvo ante la estatua de Maria Regina Pacis, que
mira hacia la Capilla Paulina y salió por la sacristía para dirigirse de nuevo
al Vaticano.
Fuente: Vatican News.
