Religiosa amiga del Papa pudo ver su cuerpo muy de cerca
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Genevieve
Jeannigros estuvo conmovida al ver a tantas personas despedir a Francisco.
David
Mora, periodista
El
Papa Francisco se caracterizó por salirse de los protocolos y las costumbres, y
en su capilla ardiente esto se ha visto reflejado con Genevieve Jeannigros,
religiosa franco-argentina de la Congregación de las Hermanitas de Jesús, quien
pudo ver su cuerpo de cerca por más de 20 minutos, rompiendo de las reglas.
El
protocolo decía que los primeros que debían saludar el féretro del Santo Padre
eran los cardenales, obispos y sacerdotes que trabajan en los dicasterios. Pero
esta monja se saltó toda la fila y se posicionó en un costado del ataúd, sin
que nadie le dijera nada, aún cuando a muchos se les ha pedido pasar rápido por
la gran afluencia de personas.
Francisco
solía llamar a esta religiosa "enfant terrible", solían tener una grata amistad
desde que antes de ser Papa, cuando el Cardenal Bergoglio era el arzobispo de
Buenos Aires, Argentina.
Sor
Jeannigros es sobrina de Sor Leonié Duquet, una religiosa francesa desaparecida
durante la represión de la dictadura argentina en 1977, su cuerpo fue
encontrado en una fosa común donde también estaba el cadáver de Esther
Ballestrino de Careaga, la primera jefa del joven Jorge Mario Bergoglio cuando trabajó
como perito químico. Algunas investigaciones forenses dejaron claro que fueron
víctimas de los vuelos de la muerte, hechos por la dictadura militar que
gobernó Argentina entre 1976 y 1983 para asesinar a los detenidos desaparecidos
y eliminar las pruebas del delito.
"Enfant
terrible" actualmente vive con un grupo de feriantes y artistas de circo del Luna
Park de Ostia Lido, a las afueras de Roma. Muchos no tienen el servicio de
electricidad y tienen problemas con la recolección de basura. Una vez electo
pontífice, en julio de 2014, Francisco los visitó durante una de sus escapadas
por Roma.
Otra
de las áreas en las que Sor Jeannigros ha dedicado su vida religiosa es en
acompañar pastoralmente a un grupo de transexuales obligados a prostituirse
para subsistir en las afueras de Roma, incluso los llevó a una audiencia general
con el Papa Francisco en la Plaza de San Pedro.
Durante
la vela del Sucesor de San Pedro, la religiosa se ha acercado en cuatro
ocasiones, la última vez lo hizo el viernes 25 de abril con una persona
transexual, según informó Vatican News.
Ante
los medios de comunicación, Jeanningros compartió que extrañará "sus ojos, su
mirada, cuando me decía: "Sigue adelante"". También se mostró conmovida de ver
a tantas personas.
Durante
la capilla ardiente, se estima que hubo alrededor de 150.000 personas que
fueron a despedirse del Santo Padre.
Fuentes: Vatican News y ACI Prensa.
