Fieles católicos reciben el signo de la ceniza en todo el país
·
Ayuno,
oración y limosna.
David
Mora, periodista
Durante
todo este miércoles 5 de marzo, cientos de fieles católicos visitan los templos
de todo el país para iniciar el tiempo de Cuaresma con el rito de la imposición
de la ceniza. Esta es una de las fechas con más asistencia de personas a la
Santa Misa, aun cuando no es un día de precepto ni es feriado.
Durante
la mañana, en la Catedral Metropolitana Santuario Nacional San José, se vivieron
varias celebraciones a las que asisten personas de diferentes puntos del país,
aprovechando la cercanía con sus lugares de estudio, trabajo o diferentes
compromisos; tal es el caso de Elvira Calvo, quien fue a la Santa Misa en la
Parroquia Nuestra Señora del Carmen porque tenía una cita médica.
Otras
personas asisten acompañadas por sus familiares, un ejemplo es Patricia Núñez, vecina
de Curridabat, quien trajo a su madre al templo catedralicio porque a ella le
gusta asistir en este día al Santuario de San José, o el caso de Jorge Valverde;
que asistió con su esposa, Carmen Jiménez, y su cuñada, Sonia Jiménez, porque
desean vivir el llamado de la Cuaresma a recordar "polvo somos y al polvo
volveremos".
El
Padre Alfonso Mora, especialista en Liturgia, comentó a Radio Fides minutos
antes de comenzar la Misa de 11 de la mañana en la Catedral josefina, que se
está viviendo "una marcha optimista y esperanzadora a través del desierto para
llegar a la meta, que no es la Cuaresma en sí; sino que la Cuaresma es camino",
por eso "ya desde hoy, Miércoles de Ceniza, nos estamos preparando en un
proceso de purificación, de mortificación, en un proceso alegre del recuerdo de
nuestro bautismo para llegar a celebrar con todo su esplendor la Pascua del
Señor, en la noche de la Vigilia Pascual".
Por
su parte, Bryan Bogantes, feligrés de la Parroquia Inmaculada Concepción de
María, en Heredia, participó de la celebración al mediodía, llamándole la
atención la asistencia de trabajadores municipales y de la Universidad Nacional
(UNA), entre ellos académicos, bibliotecólogos, personal de orientación,
bibliotecología y directores de escuelas. También en la Parroquia San Antonio de
Padua, en Vázquez de Coronado, se realizaron las celebraciones eucarísticas en
el templo que se mantiene en construcción.
También
en algunos centros educativos se realizó el rito penitencial de la ceniza, el párroco
de San Pablo de Heredia, el Padre Manuel Peña, presidió la celebración en el
Jardín de Niños José Ezequiel González Vindas y en el Liceo Mario Vindas. Por
otro lado, en el Seminario Nacional Nuestra Señora de los Ángeles, en Paso Ancho,
se celebró la Santa Misa a las 6:30 de la mañana, en la que asistieron todos los seminaristas y sus formadores, además de
seguir durante el día el ayuno que pide la Iglesia.
En
el tiempo de Cuaresma se tienen muy presentes las prácticas del ayuno, la
oración y la limosna, como formas de unirse más a Dios.
"Debemos
tener en cuenta que la oración es fundamental, porque es nuestro espíritu abierto
para comunicarse directamente con Dios, el ayuno nos comunica con el hermano;
porque al ser yo capaz de ayunar, soy capaz también de compartir, y sin el
compartir lo mío con el hermano necesitado no tiene sentido el ayuno, si voy a
renunciar a algo que sea en una práctica de amor fraterno, que sea con el
corazón abierto hacia el hermano. La limosna va en la misma línea del ayuno,
porque nos abre hacia el culto reverente a Dios, pero nos abre hacia el culto
de compartir con el hermano", explicó el Padre Mora.
La
Cuaresma consta de 46 días naturales, culminando el Jueves Santo al atardecer;
sin embargo, los domingos no cuentan como días penitenciales, por lo que estos
no se cuentan en la suma de los días, tomándose en cuenta solo 40 días.