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Iglesia

Arquidiócesis peregrina hacia el Cristo Negro

Fieles caminaron desde San José hacia Alajuelita este domingo

·         Durante el camino se conocieron testimonios de sanación.

 

David Mora, periodista

Las calles de la capital se llenaron de cantos, fiesta y alegría la mañana de este domingo 12 de enero, al llevarse a cabo la peregrinación de la Arquidiócesis de San José desde la Catedral Metropolitana hacia el Santuario Nacional Santo Cristo de Esquipulas en Alajuelita.

Centenares de católicos comenzaron a caminar a eso de las 9 de la mañana en el centro de San José, donde el arzobispo metropolitano, Monseñor José Rafael Quirós, los envió y les brindó la bendición. Durante el camino se realizaron paradas en la Parroquia Cristo Rey del Universo y Sagrada Familia, donde fueron recibidos por los párrocos de ambas Iglesias; el Padre Sergio Valverde y el Padre Norberto González respectivamente, para hacer un momento de oración y descanso.

La procesión estuvo encabezada por el rector del Santuario Nacional Santo Cristo de Esquipulas, el Padre Enrique Rivero, acompañado por los vicarios parroquiales, el Padre Julián Pérez y Juan Manuel Arias, quienes iban dirigiendo los cánticos de los feligreses, además de haber rezado los misterios gloriosos del Santo Rosario en el camino, pidiendo a la Virgen María su intercesión por las situaciones de los países de América Latina.

"Caminamos con alegría, con Cristo Jesús, para agradecer todas las bendiciones que nos regaló en el año que pasó y porque sabemos que este año nuevo lo empezamos con él. Sabemos que nos acompaña, estamos guiados en que su gracia nos va a acompañar en todo momento", expresó el Padre Rivero a Radio Fides durante el trayecto.

Por su parte, también se conocieron diversos testimonios de sanación atribuidos a esta devoción a Jesucristo crucificado, uno de ellos fue Rafael Quesada; quien viajó desde San Josecito de Heredia para agradecer la curación de un cáncer de garganta que padeció. También muchas personas hicieron la peregrinación para pedir la intervención del Señor ante diversas situaciones difíciles que atraviesan.

Con la música de una comparsa, la procesión llegó minutos después de las 11 de la mañana al Santuario, donde comenzó la Santa Eucaristía de la Fiesta del Bautismo del Señor, presidida por el rector y concelebrada por los vicarios parroquiales.