En relación con el reciente decreto sobre estipendios, ofrendas y subsidios eclesiásticos emitido por la Arquidiócesis de San José, queremos hacer una aclaración importante:
La
Iglesia reafirma su compromiso de servicio a todos los fieles, con especial
atención a la necesidad de asegurar el acceso a los sacramentos,
independientemente de la situación económica de cada persona. El enfoque
primordial de la Iglesia es siempre el cuidado del pueblo de Dios, recordando
que su misión es pastoral, no lucrativa.
Si
bien las contribuciones voluntarias de los fieles ayudan al sostenimiento de la
misión pastoral y caritativa de la Iglesia, estas no deben interpretarse como
un requisito obligatorio para la recepción de los sacramentos. Ningún fiel será
excluido de la vida sacramental por razones económicas, ya que la atención
pastoral debe estar siempre al servicio del bien común y nunca condicionada por
las capacidades financieras.
La
Iglesia insiste en que los sacramentos estarán siempre disponibles para todos,
y cualquier ofrenda será recibida de manera voluntaria, sin que su ausencia
constituya un impedimento para participar plenamente en la vida de la comunidad
parroquial.
Atentamente,
Arquidiócesis de San José