Papa se reunió con comediantes en el Palacio Apostólico
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Santo
Padre recomendó rezar la oración de Santo Tomás Moro para tener buen humor
David
Mora, periodista
Este
viernes 14 de junio, el Palacio Apostólico en el Vaticano se llenó de más de
100 humoristas venidos desde diferentes partes del mundo para participar de un
encuentro con el Papa Francisco.
Figuras
como Stephen Colbert (presentador de televisión), Chris Rock (actor y quinto
mejor monologuista en Estados Unidos en Comedy Central), Whoopi Goldberg (protagonista
de Cambio de Hábito), Jimmy Fallon (conductor de "The Tonight Show Starring
Jimmy Fallon"), Florinda Meza (viuda de Roberto Gómez Bolaños "Chespirito" e
intérprete de Doña Florinda), Chumel Torres (youtuber mexicano) y Liz Pereira (humorista
y actriz colombiana) fueron algunas de las que se hicieron presentes a este
evento, donde es la primera vez que el Santo Padre hace una audiencia con
comediantes.
El
líder de la Iglesia Católica dirigió un discurso en el que se mostró admirado
de cómo los artistas hablan con humor e ironía de las realidades mundiales y
hechos de la historia, además de que "denuncian los excesos del poder, dan voz
a situaciones olvidadas; ponen de relieve abusos, pero sin sembrar la alarma o
el terror, la ansiedad o el miedo", sino que "despiertan el sentido crítico
haciendo reír y sonreír".
Una
de las situaciones que el Papa lamentó es la difusión de noticias pesimistas a
nivel mundial, pero al mismo tiempo le alegra que la comedia haga un contraste
con esto al no ir nunca en contra de nadie; sino siendo simpática, empática,
inclusiva, ayudando a las personas a superar el estrés cotidiano y poder tomar
la vida con humor; una gracia que, confesó, pide a Dios todos los días rezando
la oración de Santo Tomás Moro, lo cual también recomendó a los cómicos.
"Es
más fácil reír juntos que solos: La alegría permite compartir y es el mejor
antídoto contra el egoísmo y el individualismo. La risa ayuda a romper las
barreras sociales, a crear vínculos entre las personas. Nos permite expresar
emociones y pensamientos, ayudando a construir una cultura compartida y a crear
espacios de libertad", manifestó.
El
obispo de Roma pidió a los humoristas seguir "animando a la gente", en especial "a quienes más les cuesta mirar la vida con esperanza", además de no olvidar
que "el humor no ofende, no humilla, no clava a las personas en sus defectos".
"¿Se
puede también reír de Dios? Por supuesto, y esto no es blasfemia, como jugamos
y bromeamos con las personas que queremos. La sabiduría y la tradición literaria
judías son maestras en esto. Se puede hacer, pero sin ofender los sentimientos
religiosos de los creyentes, sobre todo de los pobres", agregó el pontífice.
La
audiencia finalizó con el saludo del Papa a cada uno de los invitados, quienes
se tomaron fotos con él y le entregaron regalos, entre ellos un banderín de San
Lorenzo confeccionado por sacerdotes argentinos, caricaturas y algunas prendas.
Fuentes: Vatican News y ACI Prensa.
