Seminaristas se comprometieron a seguir su formación hacia el sacerdocio

·         Rito se realiza cuando los seminaristas inician sus estudios teológicos

David Mora, periodista

Este domingo 28 de abril, seis seminaristas se comprometieron públicamente a continuar su formación sacerdotal, de manera libre y voluntaria, al ser admitidos como candidatos a las órdenes sagradas.

Se trata de un rito donde el obispo realiza varias preguntas a los seminaristas que han sido seleccionados como candidatos a las órdenes, y se lleva a cabo cuando su formación se ve avanzada, por lo que se inicia una nueva etapa donde adquieren más compromiso con la posible vocación sacerdotal que se encuentran discerniendo.

El rito se llevó a cabo durante la Santa Misa de las 11 de la mañana en la Catedral Metropolitana Santuario Nacional San José, la cual fue presidida por el arzobispo metropolitano, Monseñor José Rafael Quirós, acompañado del obispo auxiliar de la Arquidiócesis de San José, Monseñor Daniel Blanco, el vicario episcopal para la vida del clero, el Padre Gerardo León, y varios sacerdotes que se desempeñan como formadores.

Los seminaristas admitidos a la candidatura a las órdenes sagradas fueron Jesús Cruz, José María Ramírez; del Seminario Nacional Nuestra Señora de los Ángeles, Moisés Arias, Nahúm Castillo, José Jiménez y José Estrada; del Seminario Alma Redemptoris Mater.

Ramírez, oriundo de la Parroquia San Ignacio de Acosta, conversó con Radio Fides y comentó que días antes participó junto a sus compañeros de un retiro de silencio, donde se adoró al Santísimo Sacramento, y profundizaron en el sentido de entrega a Cristo que implica el llamado que sienten en el corazón.

"Es muy significativo, porque, aunque el rito consta de dos preguntas; que comienzan con el llamado del candidato por su nombre, y uno responde "presente", y responde "sí, quiero" a las dos preguntas. Significa que sí quiero formarme, sí quiero configurarme con Cristo, y sí quiero manifestar y expresar este compromiso de tratar de responder al Señor a este llamado a la santidad que me hace a través de un futuro ministerio sacerdotal, pero sobre todo a seguir formándonos, porque eso es lo que sigue, cuatro años de formarnos humanamente, académicamente, pastoralmente, de seguir creciendo espiritualmente, pero sobre todo con la mirada puesta en Jesucristo", manifestó el seminarista.

En este caso, la admisión se está realizando cuando los seminaristas han finalizado su carrera en Filosofía y están iniciando sus estudios teológicos, que comprenden los últimos cuatro años de formación, ambas carreras adquieren el título de bachillerato por parte de la Universidad Católica de Costa Rica (UCAT).