Una historia de conversión
· "Me
sedujiste, Señor, y me dejé seducir"
David
Mora, periodista
Durante
varios años se le ha visto en varias interpretaciones de la Semana Santa en San
José, varias de ellas en el papel de Simón de Cirene, lo que muchos no saben es
que detrás del actor Wilson Ulate se esconde una historia de conversión a
través del teatro.
Después
de la Procesión del Santo Encuentro del Viernes Santo, el intérprete conversó
con Radio Fides para contar su experiencia, ha hecho teatro desde los 10 años y
ha manifestado su fe a través del arte de la actuación desde hace 27 años.
Wilson
proviene de una familia católica y con buenas costumbres; sin embargo, comentó
que en su adolescencia pasó por momentos difíciles como enfrentar un accidente
que tuvo su padre y malas situaciones económicas, cosas que lo fueron llevando
a caer en las drogas y en el alcohol, incluso siendo un joven de 18 años estuvo
detenido una semana y luego de un juicio quedó en libertad.
"Tal
vez yo no comprendía lo que Dios quería para mí, fue hasta mis 23 años que intenté
acercarme a Dios, y la Pastoral Juvenil me recibió, aunque ya no cabía por mi
edad. Comencé por hacer un retiro espiritual...es un retiro que se llama "Me sedujiste,
Señor, y yo me dejé seducir", curiosamente es un retiro donde la Pasión, Muerte
y Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo es muy importante, es el centro del retiro",
contó el actor.
Ulate
tiene un sueño: Que exista un teatro católico. Un espacio donde las personas
puedan ir a disfrutar de espectáculos con contenido positivo sobre la fe
cristiana y fortalezcan su espiritualidad. También contó que para él hacer
estos papeles significa mucho por el hecho de hacerlos con amor y devoción
personal, ya que no es necesario para un actor ser creyente para lograr una
buena interpretación de los personajes bíblicos.