Invitan a jornada de oración por la situación del país
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Contemplar
el rostro de Cristo en los que sufren
David
Mora, periodista
El
Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), la Confederación Latinoamericana de
Religiosos (CLAR) y Cáritas América Latina y El Caribe emitieron un comunicado
de prensa para pedir a los fieles católicos que se unan a una jornada de
oración el viernes 22 de marzo, en la cual se ofrezcan las prácticas cuaresmales
por los haitianos.
Las
entidades eclesiásticas recordaron que en Haití 3 millones de niños necesitan
ayuda humanitaria, además de que 362.000 personas son desplazados internos, más
de la mitad de la población vive en pobreza extrema y la esperanza de vida
supera un poco los 64 años.
"Desde
hace tiempo el pueblo de Haití viene sufriendo mucho. En las últimas semanas la
situación social y humanitaria se ha agravado externamente. Somos conscientes
que es el fruto de múltiples factores y de una historia compleja, pero no
podemos dejar de hacernos prójimos...Sabemos que la solución no está directamente
en nuestras manos y que necesita de la valentía y determinación de hombres y
mujeres con poder decisión nacional e internacional. Sin embargo, estamos
convencidos en la fuerza y el poder de la oración, que además nos acerca y
expresa nuestra solidaridad con el pueblo haitiano", se expresa en el
comunicado.
También
se recordó que la actitud cristiana es ver el rostro de Cristo en los que más
sufren, y por lo tanto no se puede permanecer indiferente ante esa realidad del
pueblo latinoamericano y caribeño.
Antiguamente
la fiesta de Nuestra Señora de los Dolores estaba establecida el viernes
anterior a la Semana Santa, conocido como el "Viernes de Dolores", tras la
reforma litúrgica de 1969 se trasladó al 15 de setiembre; sin embargo, en muchos
pueblos quedó la costumbre de recordar los dolores de la Madre de Dios ese
último viernes de Cuaresma, por lo que la Santa Sede ha dado el permiso para
celebrar votivamente a María al pie de la cruz este día.
Las
autoridades eclesiales recordaron esto para comunicar que "es María dolida hoy
por su Hijo en el rostro del pueblo haitiano crucificado por la miseria y la
violencia. A ella, madre de ternura y misericordia, queremos pedir su
intercesión para que el Señor allane los caminos, disponga los corazones, mueva
las voluntades, para que nuestros hermanos puedan gozar pronto de una vida
plena".
El
comunicado finaliza invitando a otras comunidades cristianas y religiosas a
unirse en oración, también a las personas no creyentes a que se unan en los
sentimientos de consciencia por la gravedad de la situación.