Doctrina de la Fe deja claro que los católicos no pueden pertenecer a estas logias

·         Iglesia Católica siempre ha condenado la masonería

David Mora, periodista

Este miércoles 15 de noviembre, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe, difundió un comunicado firmado de su prefecto, el Cardenal Víctor Fernández y con la aprobación del Papa Francisco, donde se afirmó que los católicos no pueden pertenecer a las logias masónicas, ya que esto es irreconciliable con la fe de la Iglesia.

Este documento es una respuesta al obispo de Dumaguete, Filipinas, Monseñor Julito Cortes, debido a que este prelado comentó a la Santa Sede que siente una preocupación porque en su diócesis existe un aumento de fieles que se suman a las filas de la masonería, por lo que pidió "sugerencias sobre cómo responder adecuadamente a esta realidad desde el punto de vista pastoral, tendiendo en cuenta también las implicaciones doctrinales".

El Cardenal Fernández explica en el comunicado que tiene consciencia de que en Filipinas la masonería es muy significativa y que involucra "no sólo a quienes están formalmente inscritos en las logias masónicas", también afecta "a un gran número de simpatizantes y asociados que están personalmente convencidos de que no hay oposición entre la pertenencia a la Iglesia Católica y a las logias masónicas".

Por esto piden a los obispos filipinos a realizar una estrategia con toda la Conferencia Episcopal teniendo en cuenta estos dos enfoques para abordar la situación, entre esto se les pide que "lleven a cabo catequesis accesibles al pueblo y en todas las parroquias sobre las razones de la irreconciabilidad entre la Fe Católica y la masonería", además de una pronunciación pública sobre el tema.

El purpurado recordó lo que ya la Iglesia ha dicho sobre este tema en distintas oportunidades. "En el plano doctrinal, debe recordarse que la pertenencia activa a la masonería por parte de un fiel está prohibida debido a la irreconciabilidad entre la doctrina católica y la masonería", expresó Fernández agregando que quienes están inscritos en estas logias, incluidos los clérigos, y hayan abrazado estos principios masónicos, tienen la obligación de responder a las disposiciones hechas por los obispos filipinos en 2003.

La Iglesia Católica, en el Código de Derecho Canónico, específicamente en el numeral 1374, establece que "quien se inscribe en una asociación que maquina contra la Iglesia debe ser castigado con una pena justa, quien promueve o dirige esa asociación, ha de ser castigado con entredicho".

Entre las versiones de 1983 y 1917 sobre esta condena a la masonería había una contrariedad: no hay una pena automática ni se habla claro sobre las logias masónicas, por esto, el entonces prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, el Cardenal Joseph Ratzinger, posteriormente el Papa Benedicto XVI, publicó la "Declaración sobre la masonería".

En ese documento, el alemán dejó claro que nunca ha existido un cambio en la percepción de la Iglesia Católica sobre esta organización y sus principios, por lo que quienes están inscritos están viviendo en un pecado grave y no se pueden acercar a la Sagrada Comunión. Estas disposiciones están vigentes hasta el presente.

Fuente: ACI Prensa.