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Iglesia

La Negrita regresó a su casa

Virgen de Los Ángeles fue llevada a la Basílica en la tradicional "Pasada"

·         La Iglesia de Orosi fue la encargada de realizar la carroza

 

David Mora, periodista

Como ya es tradición, el primer domingo de setiembre la Virgen de Los Ángeles regresa hasta su Basílica en Cartago en medio de muchos devotos que la acompañan en su recorrido. Esto volvió a ocurrir el domingo 3 de setiembre.

Los fieles le dieron la despedida a la Patrona de Costa Rica en la Catedral del Carmen en la Vieja Metrópoli con una Santa Eucaristía, donde estuvo presente el nuncio apostólico, Monseñor Bruno Musaró, la imagen fue puesta en andas y llevada en procesión por la nave central hacia la carroza que la estaba esperando afuera. El Cuerpo de Bomberos fue el encargado de transportar a "La Negrita".

Desde la noche del sábado 2 de setiembre y durante la madrugada del domingo, cientos de fieles se encargaron de engalanar las calles de Cartago, creando alfombras que tenían figuras en el pavimento hechas con aserrín, entre ellas representaciones de la Virgen de Los Ángeles, la Virgen de Guadalupe, parroquias de la Diócesis, Jesús Nazareno, San José, mensajes a favor de la paz, la vida y la familia, entre otras consignas.

La confección de la carroza que este año llevó de vuelta a "La Negrita" a la Basílica de Nuestra Señora de Los Ángeles estuvo a cargo de la Iglesia San José de Orosi, que engalanó a la venerada imagen con todo tipo de flores; algunas fueron usadas para formar el anagrama mariano, también tuvo frutas y verduras como ofrendas, pero algo que caracterizó a este medio de transporte fue una réplica pequeña del templo colonial y una imagen del Patriarca San José que iba detrás de la estatua hallada en 1635.

Después del mediodía, la Patrona de Costa Rica llegó a su Santuario, donde fue recibida entre vítores, aplausos, cámaras de celulares que la grababan, pañuelos celestes y blancos que se agitaban y su himno cantado con mucha solemnidad mientras ingresaba a la Basílica por la nave central. Al ser puesta de nuevo en su trono, se procedió a celebrar una Santa Eucaristía de bienvenida, esta fue presidida por el párroco de la Parroquia Santa Teresita del Niño Jesús, en San José, el Padre Carlos Hernández.

El clérigo resaltó el amor que los fieles costarricenses tienen por la Virgen de los Ángeles, describiendo como la imagen recibió muestras de afecto al ser trasladada a la Basílica, esto lo señaló como un signo de esperanza en medio de un mundo que cada vez parece aumentar su violencia.

"Hoy hemos visto personas de todo tipo, de toda edad, con su corazón engrandecido, que aplaudían la imagen, que lloraban, que expresaban su gozo, que levantaban sus pañuelos, lo que fuese, con tal de sentirse a la par de esta Madre extraordinaria que nos cubre con su manto y que en verdad nos corona con la esperanza y el amor...Yo creo que este 3 de setiembre del 2023 ha de ser un despertar al amor, un despertar a la esperanza, un despertar al gozo porque el Señor nos ha puesto una Madre bendita, nos ha puesto una Madre maravillosa, nos ha puesto una Madre excepcional", manifestó el sacerdote en su homilía.  

La tradicional "Pasada" se origina en 1782, cuando el obispo Esteban Lorenzo Tristán se enfadó por los excesos que ocurrían en la fiesta del hallazgo de la imagen, pues estas se habían convertido en un "bailongo, fandango y parranda", ya que se llegaba a consumir licor por parte del pueblo, las autoridades y hasta los mismos clérigos adentro de la iglesia colonial de aquel tiempo, además de que se realizaban corridas de toros en honor a "La Negrita".

El prelado ante esta situación ordenó como castigo que la imagen fuera retirada de su iglesia el 1 de agosto, para evitar que estuviera presente cuando ocurrían los excesos, después cambió esa disposición trasladando la salida de la Virgen hasta el 3 de agosto, ya que los fieles devotos de la Virgen le pidieron que la imagen estuviera presente en su día.

Así fue como este castigo se convirtió en una fiesta para todos los costarricenses, algo que se refleja cada 3 de agosto y cada primer domingo de setiembre. Ahora la Patrona de Costa Rica está de nuevo en la Basílica cartaginesa para recibir a los fieles que llegan a visitarla.