Cardenal Zuppi habla sobre el trabajo por el fin de la guerra en Ucrania
·
La guerra "es una derrota para todos"
David Mora, periodista
El arzobispo de Bolonia y
presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, el Cardenal Mateo Zuppi,
presentó el libro de Andrea Riccardi, "Il grido della pace" (El grito de paz)
el pasado 4 de julio en la sede de San Edigio en Roma, allí respondió afirmativamente
sobre las preguntas de la prensa sobre si se encontró con el Papa Francisco
después de sus misiones en Kyiv y Moscú.
El purpurado explicó que la
prioridad ahora es "trabajar ahora por los más desfavorecidos, como los niños,
y ver si podemos poner en marcha el mecanismo para ellos y ayudar a la parte
humanitaria. Esperamos empezar por los más pequeños, los más frágiles. Los
niños deben poder regresar a Ucrania. Así que el siguiente paso será, en primer
lugar, examinar a los niños y, a continuación, ver cómo recuperarlos, empezando
por los más frágiles".
Durante la presentación de
texto, el Cardenal comentó que hay una utilidad en el libro de Riccardi, que es
tomar conciencia del momento que la humanidad vive, mostrando la capacidad de
tejer la red sobre lo que Guiseppe De Rita denomina "profundidad de la historia",
además de comprender que lo que puede poner fin al conflicto bélico debe
buscarse en lo complejo de la realidad. El religioso añadió que la guerra ?es
una derrota para todos?, por lo que es necesario que "también la Iglesia de hoy
sea capaz de ayudar, de recomenzar en la construcción del nosotros, en el paso
del "yo" a "un nosotros más grande"".
El autor de libro comentó que este es el momento de "volver a pensar qué es la paz", además de recordar lo dicho por un soldado de infantería de la Segunda Guerra Mundial, "la guerra es mala porque se termina bajo tierra". Precisamente porque a muchos la guerra ya nos les da miedo, es que se ve como un juego, visión que debe ser derrotada, "porque esto conduce a su aceptación inexorable, a una familiaridad inaceptable con la guerra, casi a su rehabilitación". Así pues, continuó Riccardi, "el problema es redescubrir una emoción de horror por la guerra y un impulso hacia la paz".
Riccardi manifiesta que no ve
dónde está el movimiento pacifista, pero recuerda que "hay muchos fragmentos en
movimiento, y por eso estamos llamados a recomponerlos para construir la
comunidad, para reconstruir el nosotros". También recordó que hay que volver a
mirar la historia de acontecimientos fuertes para la humanidad como la Segunda
Guerra Mundial y la Shoah para difundir entre la población una cultura de paz.
Fuente: Vatican News.