Responsive image

Iglesia

42 años de un momento impactante

El 13 de mayo de 1981 San Juan Pablo II fue herido en la Plaza de San Pedro

·         Karol Wojtyla perdonó a su agresor

 

David Mora, periodista.


Cada 13 de mayo se celebra en la Iglesia Católica un aniversario más de las apariciones de Nuestra Señora de Fátima, en Portugal, pero esta fecha también es significativa entre los fieles que recuerdan a San Juan Pablo II, pues hace 42 años, el 13 de mayo de 1981 fue herido de bala en la Plaza de San Pedro.

Esa ocasión fue la primera vez que alguien intentaba acabar con la vida del Santo Padre de esa manera. Era un miércoles más en Roma, Karol Wojtyla se dirigía en medio de sus saludos a la gente a dar una audiencia general, pero esto se vio truncado, pues justo después de haber alzado a una niña y devolverla a sus padres, toda la Plaza de San Pedro quedó en silencio al escuchar cuatro disparos, y vieron al Papa caer sobre los brazos de su secretario personal, Monseñor Stanislaw Dziwisz.

El Santo Padre fue impactado con dos balas en el abdomen, una en el brazo derecho y otra en la mano izquierda, perdiendo casi tres cuartos de sangre y sufrió un shock por desangramiento debido a una perforación intestinal. Ante esto fue llevado al policlínico Agostino Gemelli, donde fue intervenido de emergencia durante seis horas, ocupando transfusiones de sangre y se le realizó una colostomía temporal que después se deshizo.

Cinco días después del atentado y de la intervención médica, San Juan Pablo II perdonó públicamente al terrorista turco Mehmet Ali Agca, quien fue el que le disparó, también oró por dos turistas estadounidenses que salieron heridas ese día. Esto lo dijo en un mensaje grabado en la habitación del hospital, que se transmitió por las ondas de la radio del Vaticano. "Ruego por ese hermano nuestro que disparó contra mí y al que sinceramente he perdonado", manifestó el Papa.

Pocas semanas después, el 3 de junio de 1981, el Sucesor de San Pedro fue dado de alta del centro médico, donde compartió con los pacientes durante su estadía, al salir estos lo despidieron ruidosamente. El santo polaco salió caminando sonriente, tomó un automóvil que lo llevó hasta el Vaticano, donde fue recibido por un grupo de religiosos y misioneros del personal, allí agradeció por las plegarias y destacó su pertenencia a la Virgen María con el lema "Totus Tuus"; es decir "Soy todo tuyo". Este mensaje también estuvo en su escudo pontificio.

Agca había sido detenido cerca del sitio donde atentó contra la vida del Papa, pocos minutos después de hacerlo gracias a la intervención de una monja, posteriormente fue condenado a cadena perpetua. Cada vez que era interrogado daba una versión distinta, por lo que nunca se conoció cuál fue la verdadera razón por la que le disparó al líder de la Iglesia Católica. Más tarde, el 27 de diciembre de 1983, con motivo de la Navidad, el Santo Padre lo visitó en la prisión de Rebibbia, donde se sentaron en el rincón de una celda, Agca besó el anillo del polaco y él le reiteró que lo perdonaba, se dice que a San Juan Pablo II Agca sí le reveló su motivo para atentarlo, aunque esto no se sabe a ciencia cierta.

En el año 2000, el obispo de Roma le escribió al entonces presidente italiano, Carlo Azeglio Ciampi, para pedirle un "gesto de clemencia" para el pistolero, por lo que fue liberado, pero al estar en Turquía fue encarcelado por delitos anteriores al atentado, quedando completamente en libertad el 14 de enero de 2006.

San Juan Pablo II siempre le atribuyó su vida después del atentado a la Virgen de Fátima, al haber ocurrido esta situación en su festividad, por lo que un año después viajó a Portugal, visitó el Santuario de Fátima, le dio gracias a la Madre de Dios y coronó la imagen de la aparición, colocando una la bala que le fue extraída en la parte interior de la corona, la cual se puede apreciar actualmente.

Los visitantes en el Vaticano pueden apreciar en la Plaza de San Pedro el punto exacto donde Karol Wojtyla fue herido de bala, pues ahí se encuentra una placa para conmemorar este hecho.