Padre Sergio no pudo contener las lágrimas
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Comentarios positivos sobre la obra social
David Mora, periodista
Este pasado 6 de mayo, cinco
jóvenes del albergue de la Asociación Obras del Espíritu Santo (AOES) culminaron
sus estudios universitarios y se graduaron como administradores de empresas. El
director de la organización y párroco de Cristo Rey, el Padre Sergio Valverde,
estuvo presente y no pudo contener las lágrimas de alegría.
AOES publicó la noticia en su cuenta de
Facebook, donde se mostraron agradecidos con el Instituto Cosvic, entidad que
brindó las becas que hicieron posible que los muchachos estudiaran la carrera
administrativa.
"Al Padre Sergio se le
salieron las lágrimas. ¿Y cómo no? ¡Si hoy 5 jóvenes de nuestros albergues se
graduaron en administración de empresas...Nos sentimos muy orgullosos. ¡Felicidades
muchachos!", escribieron en la red social el sábado anterior.
En la publicación hecha por
AOES, cientos de comentarios positivos muestran como testimonio la labor social
que hace el párroco de esta comunidad, la cual se ha ido forjando con el paso
de los años desde su llegada. También definen el gesto de asistir al evento y
llenase de alegría como "un papá orgulloso de poder ver a sus hijos graduarse" y mencionan la efectividad de la organización, pues "si estos jóvenes no
hubieran contado con la mano que les brinda el Padre Sergio con tanto amor,
podría haber sido otra la historia".
"Por uno sólo de estos
muchachos que reciban ayuda, alimento, educación y formación en los programas
de Obras del Espíritu Santo, ya valió la pena el esfuerzo del Padre Sergio y se
sus colaboradores y voluntarios. Hoy son 5 muchachos que se gradúan en la
universidad, que cada año se multipliquen esos resultados", escribió Lía Calvo
en los comentarios de la publicación.
El pasado 28 de febrero, el
clérigo llegó a sus 55 años, lo cual fue celebrado en las instalaciones de la
asociación, allí recordó el inicio de esta obra cuando llegó a Cristo Rey en
medio de amenazas de muerte, problemáticas de delincuencia y drogadicción, él
mismo encontró en un terrero, donde actualmente hay una capilla, a una niña que
fue abusada y enterrada viva, además de huesos humanos de niños. Allí inició su
lucha por los necesitados que se ha convertido en la organización que es hoy.