Obispo emérito de Tilarán fue reconocido por sus aportes en teología, educación y pastoral
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Orden al Mérito de la República se encarga
de destacar los logros de distintas personalidades
David Mora, periodista.
El pasado 18 de abril, el gobierno
de Italia condecoró como caballero al obispo emérito de la Diócesis de Tilarán-Liberia,
Monseñor Vittorino Girardi, como parte de un reconocimiento a sus aportes en
teología, educación y pastoral.
El prelado se destaca por
realizar trabajos, charlas, conferencias, artículos, es educador y también se
han desempeñado como parte del equipo de profesores y predicadores en el
Seminario Nacional Nuestra Señora de Los Ángeles; tanto en el Introductorio, con
su sede en Alajuela, como en el Seminario Mayor, en Paso Ancho. Normalmente,
como obispo emérito, se puede ver que le invitan a diversas parroquias para brindar
formaciones.
Parte de la formación que
Monseñor Girardi posee es un doctorado de Teología y un diploma en Filosofía
del Ateísmo y Pastoral de la Acción Católica por la Conferencia Episcopal
Italiana y en Mariología por el "Marianum" de Roma.
El órgano encargado de brindar
este premio fue la Orden al Mérito de la República Italiana, que es la más
importante de las órdenes de caballería nacionales italianas, esta se instauró
por el parlamento para poder reconocer los logros de distintas personalidades que
se desempeñen en el campo de la ciencia, las letras, las artes, el deporte y
otras áreas, también se toman en cuenta acciones de labor humanitaria y
servicios en carrera civil o militar.
La condecoración le fue entregada
al obispo de manos de la senadora italiana, Francesca La Marca, en la Embajada
de Italia, estuvo presente en nuncio apostólico en Costa Rica, Monseñor Bruno
Musaró y el diputado de la República, Luis Fernando Mendoza, quien brindó unas palabras
para destacar la trayectoria del religioso en diversos países.
Monseñor Vittorino Girardi es
italiano, nació el 24 de marzo de 1938 en Lendinara, un pueblo de la provincia
de Rovigo, tiene 85 años. En 1962, con 24 años de edad, realizó sus votos
perpetuos en la orden de los misioneros combonianos y al año siguiente recibió
la ordenación sacerdotal. Su carisma siempre ha sido el misionero, por lo que
la mayor parte de su presbiterado lo desempeñó en Europa, África y México.
Estuvo en España como responsable de la formación de seminaristas, en Kenia
como rector del seminario "Los Apóstoles de Jesús" y en México se desempeñó como
profesor de la Universidad Pontificia y Seminario Mayor Arquidiocesano, después
de 11 años fue enviado a Costa Rica
En 2002, tras nueve años de
trabajar en el país desarrollándose en el campo del apostolado directo y la
predicación con los sacerdotes, el Papa San Juan Pablo II nombró al religioso
misionero como tercer obispo de la Diócesis de Tilarán-Liberia, sucediendo a
Monseñor Héctor Morera, cargo en el que Monseñor Vittorino se desempeñó hasta abril
de 2016, cuando ordenó a su actual sucesor, Monseñor Manuel Eugenio Salazar,
quien fue designado por el Papa Francisco.
Parte del trabajo que aún
realiza el obispo es la elaboración de libros de filosofía y teología, además
de seguir siendo profesor en la Universidad Católica y en la Universidad Teológica
de Centroamérica.