?En camino sinodal, mujeres testigos del Resucitado?
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Anunciar que Cristo está vivo
David Mora, periodista.
Este jueves 13 de abril, el
Papa Francisco recibió en la Sala Clementina cerca de 300 religiosas de la
Unión de Superioras Mayores de Italia (USMI) con quienes, en medio de su 70°
Asamblea General, compartió el tema "En camino sinodal, mujeres testigos del
Resucitado".
Francisco les pidió a las
consagradas ser generadoras de esperanza, fermento de Dios en medio de la
humanidad, también les exhortó a dar testimonio de un encuentro con Cristo
Resucitado, ya que; de no ser así, se acabó la vida religiosa. También recordó
que Jesucristo rompe los esquemas aburridos en los que se le pretende encerrar
y sorprende con su constante creatividad divina.
El Papa hizo se basó en las
mujeres que fueron las primeras en testimoniar la Resurrección de Jesucristo, a
quienes resaltó como modelo de discípulas porque recuerdan "que si tenemos el
coraje de recuperar la frescura original del Evangelio, surgen nuevos caminos,
surgen métodos creativos, otras formas de expresión, signos más elocuentes, palabras
cargadas de renovado significado para el mundo actual".
"Vayan siempre con coraje,
busquen al Señor, lo que nos dice hoy; no lo que nos dijo ayer. Es verdad que
cada una de ustedes tiene su carisma, y éste es el espíritu con el que quieren
hacer la pregunta: con ese espíritu de los fundadores que ustedes tienen en el
corazón, hagan hoy la pregunta: "Señor, ¿hoy qué debo hacer? ¿Qué debemos
hacer?". Y las mujeres son buenas en esto, saben crear nuevos caminos, saben
dar, son valientes", manifestó el Santo Padre a las monjas.
Sobre este ejemplo, el
pontífice continuó recordando que las mujeres se pusieron a prisa para anunciar
la Resurrección a los discípulos, lo cual es un estímulo para una auténtica
conversión sinodal, ellas no se guardaron esa alegría para ellas mismas, no caminaron
solas, fueron generosas y llamaron a los demás. "La presencia de Jesús de hecho
no nos encierra en nosotros mismos, nos empuja al encuentro con los demás y a
la decisión de caminar con los demás", comentó el líder de la Iglesia Católica.
"No olvidemos que el camino
sinodal es el Espíritu Santo: Él es el líder del camino sinodal, Él es el
protagonista. Y las mujeres, en esta dinámica, van adelante con los pastores,
aunque muchas veces ustedes no se sienten valoradas y a veces comprendidas, están
disponibles para escuchar, para encontrar, para dialogar, para hacer proyectos
juntos. El camino sinodal es caminar, escuchar-¡escuchar!-escuchar y seguir
adelante. El camino sinodal no es un parlamento; el camino sinodal no es una
colección de opiniones. El camino sinodal es escuchar la vida bajo la guía del
Espíritu Santo, que es el protagonista del Sínodo. Y ustedes recorran este
camino con renovado entusiasmo, mujeres testigos del Señor Resucitado", fueron
parte de las declaraciones del Papa.
Francisco exhortó a escuchar,
mirar y tocar la realidad, a no despegarse nunca de está "órbita", también animó
a las Superioras italianas a sembrar esperanza ante la crisis vocacional que se
vive, el problema de las obras y la poca necesidad de interculturalidad de la
vida consagrada. El obispo de Roma indicó que debemos ser realistas, "pero sin
perder la alegría, la audacia y la entrega plena de esperanza".
Despegándose de la lectura, el
Papa Francisco habló espontáneamente con las monjas sobre las enfermedades de
la vida religiosa, allí tocó el tema de la amargura, la "acidez interior" de
mirar todas las dificultades y buscar siempre lo que está mal, sin ningún tipo
de esperanza. Esto lo catalogó como "el licor del diablo" y es la antítesis de
la esperanza.
El Santo Padre animó a que
cuando vean a una hermana religiosa en ese comportamiento, le ayuden a salir de
esta situación animándole a que se deje alcanzar por la dulzura del Espíritu
Santo.
Fuente: Vatican News.
