Asistencia se da por medio del Dicasterio para el Servicio de la Caridad
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Situación de los refugiados en Siria por
la guerra se agravó por el terremoto
David Mora, periodista.
Después de la tragedia ocurrida
hace más de una semana en Turquía y Siria, donde ocurrieron dos terremotos de
7,4 y 7,6 de magnitud, lo cual ha dejado un saldo de más 41.000 personas
fallecidas, el Papa Francisco envió su primera ayuda a los afectados por medio
del Dicasterio para el Servicio de la Caridad.
Desde el domingo pasado, el Santo
Padre pidió en el Ángelus que se diera una cercanía para Turquía y Siria, pero
también un apoyo concreto para aliviar "el dolor de estos pueblos que sufren
por el terremoto", ahora llega de parte suya un apoyo a través de la Limosnería
Apostólica.
El Limosnero del Papa, el Cardenal
Kinrad Krajewski, ayer llevó personalmente a la capital de la región italiana
Campania, 10.000 camisetas térmicas destinadas al campo de refugiados de Kilis,
en Turquía, a 50 kilómetros de Gaziantep y a 60 kilómetros de la ciudad siria
de Alepo. Esta mañana zarpó el barco Msc Aurelia del puerto de Nápoles, este dentro
de dos días con la ayuda del Papa, además de lo aportado por el gobierno
italiano y de otras organizaciones no gubernamentales, a Iskenderum.
Una vez llegada la ayuda, la
distribución será responsabilidad de los encargados de la Fundación Rava,
quienes están presentes en la zona desde hace tiempo y proporcionan comida y cobijo
a miles de personas sin hogar. En los últimos años tras el inicio de la guerra
en Siria, el campo se ha ampliado para recibir a unos 60.000 refugiados, aunque
muchos otros viven en campamentos improvisados Tras el terremoto, la situación
se agravó y cientos de personas se están uniendo a las familias de refugiados
que ya estaban ahí.
Con respecto a Siria, se dio a
conocer que Francisco envió por medio del Dicasterio de la Caridad, con el
Cardenal Konrad Krajewski, una ayuda económica a la Nunciatura Apostólica,
quien la distribuirá en el territorio, con el fin de apoyar a la población ya exhausta
por tantos años de guerra y ahora sumado a esto el trágico terremoto.
Fuente: Vatican News.
