Audiencia se da con motivo del vigésimo aniversario de fundación
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Santo Padre les agradeció su trabajo a lo
largo de los años
David Mora, periodista.
Este jueves 26 de enero, el
Papa Francisco recibió en el Vaticano a miembros de la asociación italiana
Fundaciones y Entes Filantrópicos, con motivo de que están celebrando el
vigésimo aniversario de su fundación. Se trata de una fundación que reúne a
fundaciones privadas que tengan orígenes, formaciones y confesiones cristianas
diferentes que trabajan en diferentes áreas para promover a la persona y
desarrollar modelos sociales y económicos sanos y solidarios.
El Santo Padre los felicitó
por su trabajo a lo largo de estos 20 años y por el enfoque cristiano con el
que realizan sus actividades. Francisco mencionó que la caridad que realizan
exige "apertura mental y capacidad de coordinación", por lo que les recomendó
prestar atención a la promoción del bien integral de la persona, la escucha de
las comunidades locales y la cercanía a los últimos.
La promoción del bien integral
de la persona es uno de los puntos clave en el mensaje del pontífice, quien
aseguró que es relevante que la asistencia material busque "emancipar a las
personas, haciéndolas protagonistas de su crecimiento, del desarrollo de sus
capacidades y dotes, tanto a nivel individual como comunitario", por lo que
todo se debe realizar en concordancia a los principios éticos sólidos, para que
el crecimiento económico se produzca en la solidaridad y la justicia.
El obispo de Roma indicó la
importancia de la intervención de la asociación en la escucha de las
comunidades locales, alegando que "no se reduzca a una ayuda esporádica, sino
que siembre semillas para el futuro allí donde vive la gente, en las situaciones que la Providencia les indica" El Papa
explicó que la humildad de las escucha es para actuar por el bien común, cuando
se le permite ser el portavoz de las necesidades de quienes están en una
situación de vulnerabilidad en las instituciones públicas.
La cercanía con los últimos
fue el punto final del Santo Padre, quien recordó el proverbio que dice que "una cadena es tan fuerte como su eslabón más débil", por ello indicó que "estar cerca de los últimos, inclinarse ante sus heridas, hacerse cargo de sus
necesidades, es sentar unas buenas bases para construir comunidades unidas y
sólidas, por un mundo mejor y un futuro de paz". El Papa instó a no olvidar
pidió la cercanía es una cualidad de Dios.
Finalmente, Francisco agradeció su labor y les animó a continuar con sabiduría y entusiasmo, antes de retirarse les impartió la bendición.
Fuente: Vatican News.