Nuncio apostólico presidió misa en la Catedral Metropolitana
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Se recordó legado del Papa Emérito
David Mora, periodista
Esta mañana, con un templo abarrotado
de fieles, se celebró en la Catedral Metropolitana, Santuario Nacional San
José, una misa de difuntos en sufragio del Papa Emérito Benedicto XVI.
La eucaristía dio inicio a las
11 de la mañana con la procesión de entrada, donde ingresaron seminaristas,
diáconos, sacerdotes concelebrantes y miembros del Cabildo Metropolitano de San
José, obispos eméritos y quienes actualmente conforman la Conferencia Episcopal
de Costa Rica (CECOR), encabezados por el nuncio apostólico, Monseñor Bruno
Musaró, quien presidió la misa.
Al iniciar la celebración, el
presidente de la CECOR, Monseñor José Manuel Garita, leyó una pequeña biografía
del pontífice fallecido el pasado 31 de diciembre de 2022, allí se recordó que "al
hacer un balance de su vida como sacerdote, obispo y papa, nos encontramos con
una rica y basta aportación a la reflexión teológica y a la acción
evangelizadora de la Iglesia, con más de 71 años de homilías publicadas en
diversos idiomas, 66 libros que recogen su experiencia docente y su camino de
fe, como papa nos ha dejado 3 encíclicas, 4 exhortaciones apostólicas, todo su
aporte lo podríamos resumir en esta frase se su testamento espiritual: "Manténganse
firmes en la fe, no se dejen confundir"".
En medio de los muchos fieles
que participaron en la celebración, no pasaron desapercibidas las personas pertenecientes
a los Heraldos del Evangelio, entre ellos dos sacerdotes que concelebraron la
misa y alrededor de unos 25 terciarios. También se hicieron presentes los
miembros del cuerpo diplomático y las autoridades civiles del gobierno, entre
ellos el ministro de Relaciones Exteriores y del Culto, Arnoldo André Tinoco y
el embajador de Costa Rica ante la Santa Sede, Federico Zamora, quien comentó
que la muerte del papa emérito le tomó por sorpresa mientras se encontraba de
vacaciones en Costa Rica, por lo que lo despidió participando de esta misa.
"Estoy aquí por esas
casualidades de la vida, estaba aquí de vacaciones visitando a mi familia y nos
tocó esta noticia del fallecimiento del Papa Emérito Benedicto XVI y como no
pude acompañarlo allá para despedirlo, pues vine acá a acompañar a la
Conferencia Episcopal y a la Nunciatura y al Gobierno en su despedida y ha sido
una ceremonia realmente significativa ante la partida de un papa muy estudioso,
que dejó un gran legado para la Iglesia y para la gente, porqué él manifestó su
fe hasta el último día", comentó Zamora.
Por su parte, Musaró resumió
en su homilía las encíclicas del Papa Emérito; Deus caritas est, publicada el
25 de diciembre de 2005, Spe salvi, publicada el 30 de noviembre de 2007 y
Caritas in veritate, publicada el 29 de junio de 2009. Por otro lado, el
arzobispo de San José, Monseñor José Rafael Quirós, recordó a Benedicto XVI con
varias anécdotas, entre ellas una audiencia en 2006 cuando recién había sido
ordenado obispo y la visita Ad Limina en 2008 donde conversaron. "Cuando acudí
a la audiencia particular, con la mayor sencillez del mundo, al ingresar a su
despacho era él quien me esperaba a la entrada de la puerta, en la conversación
que sostuvimos sobre la diócesis me pidió que le señalara en un mapa que él tenía
en el escritorio dónde quedaba la Diócesis de Limón, así con esa sencillez y de
esa manera él se acercaba a todos y nos acogió a nosotros, nuevos obispos".
Al finalizar la eucaristía, se
realizó la conmemoración del pontífice.
