Clérigo costarricense socorrió a un motociclista fallecido en accidente de tránsito

·         Atraso en la frontera fue lo que hizo posible la atención del presbítero

David Mora, periodista

Lamentablemente es muy común escuchar en las noticias sobre personas que fallecen en medio de accidentes de tránsito, independientemente de las causas que provoquen un suceso de esta índole, son un hecho que genera mucho dolor en los allegados de quienes sufren esta situación, pero pocas veces, en medio de una situación así, sucede un hecho que puede dar consuelo a los familiares de una víctima mortal repentina.

Esto es lo que sucedió el pasado lunes 12 de diciembre en Guatemala. Un accidente de tránsito cobró la vida de un motociclista, quien colisionó contra un camión, sin embargo, la víctima fue socorrida espiritualmente por el sacerdote costarricense Víctor Jiménez, perteneciente a los Heraldos del Evangelio, quien se encontraba de viaje desde El Salvador hacia Guatemala para asistir a un concierto y se encontró el suceso en el camino.

El presbítero contó que viajaron por tierra a Guatemala desde San Salvador, lo cual son de cuatro a cinco horas de viaje, sumando que él y sus compañeros tuvieron un atraso de pocas horas en la frontera por detalles que resolver, entre ellos que a uno de los acompañantes le hacía falta un documento. "Dios sabe cómo hace las cosas, nosotros no conocemos los planes de Dios, sin embargo, él hace así las cosas, sin preguntarnos, incluso sin avisarnos él sí tenía un plan para ese viaje y ese atraso. Íbamos por tierra, íbamos varios vehículos, nosotros nos quedamos ahí esperando, y entonces ya cuando salimos nos habían avisado que en varios trayectos estaban haciendo arreglos de la calle, entonces eso nos podía atrasar. Ya cuando íbamos, estábamos ya dentro de Guatemala, vimos que estaban los vehículos detenidos, y entonces empezó a pasar el tiempo, no sabíamos por qué era, imaginábamos que era algún arreglo que estaban haciendo en la vía, sin embargo, al rato nos dimos cuenta que en ningún de los dos lados pasaban los carros", manifestó el clérigo.

Después de una hora de espera, el Padre Víctor decidió salir un momento del vehículo a caminar debido al cansancio de estar dentro del carro y en su trayecto se enteró de que no se trataba de ningún arreglo en la vía, sino de un accidente de tránsito, por lo que decidió averiguar los detalles y se enteró de que un motociclista había fallecido en el lugar. "Justo había sido bien al frente nuestro, ósea, unos minutos antes de que nosotros pasásemos había sido el accidente ahí", comentó.

Jiménez pidió permiso a las autoridades que atendieron el suceso de poder pasar al sitio exacto donde ocurrió, allí encontró el cuerpo del fallecido, el cual ya habían colocado en una bolsa, el sacerdote solicitó que abrieran la bolsa para bendecir al difunto y para darle la Extremaunción. "Pude darle la absolución, condicional, claro, pues él ya no estaba consciente, y también la Unción de los Enfermos".

"Pregunté el nombre del señor, ahí me lo dieron, pues ya muchos datos más no tenían, porque no había ningún familiar cerca, estamos hablando de una carretera de la frontera de El Salvador para Guatemala, entonces no sé si eran católicos, por eso uno da los sacramentos bajo condición, pues ya le toca a Dios y dependiendo de cómo estaba su estado de espíritu, pero uno como sacerdote se siente realmente edificado de poder atender a un fiel en ese momento, darle lo que todos nosotros deseamos recibir antes de fallecer, en los últimos momentos antes de presentarnos en el juicio de Dios...para mí fue edificante cómo Dios tenía todo preparado, incluso el atraso que habíamos tenido en la frontera", testimonió el presbítero.

En las redes sociales de los Heraldos del Evangelio de El Salvador dieron a conocer este hecho donde manifestaron que "confiamos y comprobamos, que Dios y la Santísima Virgen en medio de esta tragedia, asistieron de forma especial a este hijo necesitado. Recemos por él, por su familia por todos los fallecidos el día de hoy", escribieron.

El Padre Víctor es oriundo de Costa Rica, ejerció sus primeros años de ministerio sacerdotal en este país y hace cuatro meses fue enviado a El Salvador.