Papa Francisco tuvo encuentro con estudiantes y profesores
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Testimonios de quienes trabajan por la paz
David Mora, periodista
Este lunes, el Papa Francisco
recibió en una audiencia en el Aula Pablo VI a más de seis mil estudiantes y docentes
que estaban en el "Encuentro para la Educación a la paz al cuidado", donde el
pontífice animó a los participantes a que se conviertan en "poetas de paz",
inspirado en los poemas de Jorge Luis Borges.
Francisco inició agradeciendo la
respuesta de los jóvenes a la invitación de la Red Nacional de Escuelas por la
Paz, entidad que promociona en Italia la permanencia de la educación a la paz y
los derechos humanos en los centros educativos, este culminará con la Marcha Perugia-Asís
en mayo de 2023, allí presentarán los resultados del programa educativo.
El Santo Padre manifestó que la tierra de San Francisco; Asís, se ha convertido en una referencia mundial para promover la paz, gracias a la figura del santo, quien fue un joven despreocupado y rebelde que dejó a su familia y sus riquezas para seguir a Jesús y casarse con la dama pobreza. "Aquel joven soñador sigue siendo hoy una fuente de inspiración en lo que respecta a la paz, la fraternidad, el amor a los pobres, la ecología y la economía. A lo largo de los siglos, San Francisco ha fascinado a mucha gente, como también me ha fascinado a mí, que como Papa he querido tomar su nombre", precisó el obispo de Roma.
En su discurso, el Papa
manifestó que para que haya paz, hay que "tener cuidado", ya que es común que
se hable de paz en medio de amenazas de ataques nucleares o de guerras cercanas,
pero esa preocupación debe ser igual a la de los migrantes, no sólo cuando se ve
afectada la cotidianidad debido a que se tiene un amigo o familiar que está emigrando
a otra tierra, sino en general por las necesidades de cada ser humano, por
ello, el Santo Padre puso como ejemplo la figura bíblica del samaritano que socorrió
a un forastero. "El samaritano no sabía si el desventurado era una buena
persona o un canalla, si era rico o pobre, culto o inculto, judío, samaritano como
él o extranjero; no sabía si esa adversidad "se la había buscado" o no. El
Evangelio dice: "Lo vio y se compadeció de él". Otros antes que él, también
habían visto al hombre, pero habían seguido su camino. El samaritano no se hizo
tantas preguntas, siguió el movimiento de la compasión", indicó el Papa.
También salieron a relucir
algunas personas que aportan el testimonio del trabajo por la paz, algunas de
ellas han recibido el Premio Nobel de la Paz o son desconocidos que trabajan
por este motivo silenciosamente, El Papa puso como ejemplos de ello a San Juan
XXIII, quien escribió la Encíclica "Pacem in Terris", y a Martin Luther King,
ganador del Premio Nobel. "Hoy me gustaría mencionar a dos figuras de testigos.
La primera es la de San Juan XXIII, Fue llamado el "Papa bueno", y también el "Papa
de la paz", porque en aquellos difíciles comienzos de los años sesenta,
marcados por fuertes tensiones, publicó la famosa y profética Encíclica "Pacem
in Terris". El año que viene se cumplirán 60 años, ¡y es muy oportuno! El Papa
Juan se dirigió a todos los hombres de buena voluntad, haciendo un llamamiento a
la resolución pacífica de todas las guerras mediante el diálogo y el desarme.
Fue un llamamiento que recibió mucha atención en el mundo, mucho más allá de la
comunidad católica, porque había captado una necesidad de toda la humanidad, que
sigue existiendo hoy...Unos meses después de la publicación de esa Encíclica, otro
profeta de nuestro tiempo, Martín Luther King, Premio Nobel de la Paz en 1964,
pronunció el histórico discurso en el que dijo: "Tengo un sueño". En el contexto
estadounidense, fuertemente marcado por la discriminación racial, hizo soñar a
todos con la idea de un mundo de justicia, libertad e igualdad", dijo el Papa
Francisco.
Soñar en grande, eso es a lo
que el Papa les animó a hacer a los estudiantes y profesores, además de que les
animó a participar de la Jornada Mundial de la Juventud en Lisboa; indicó que
quienes asistan se encontrarán con otros jóvenes que tienen el sueño en común
de la fraternidad basada en la fe en Dios, fuente de la paz. Además, instó a quienes
no puedan asistir presencialmente a Portugal, a que lo hagan por los medios de
comunicación.
Al finalizar, el Santo Padre
les deseó a todos un buen adviento, ya que este tiempo está construido de
pequeños gestos de paz, acogida, encuentro, comprensión, perdón, cercanía,
servicio, entre otros.
Fuente: Vatican News