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Ungidos para manifestar a Cristo

(VIDEO) Mensaje de Mons. José Rafael Quirós Quirós, Arzobispo Metropolitano


En la Catedral de San José, el pasado sábado 30 de mayo, de manera extraordinaria, por la emergencia sanitaria por el COVID19, celebré la Santa Eucaristía, con algunos miembros del clero arquidiocesano, para bendecir el óleo de los catecúmenos, el óleo de los enfermos y la consagración del Santo Crisma.

 

Allí sentimos cercana la presencia del Señor, el Ungido por excelencia, quien viene a nuestro encuentro en los momentos determinantes de nuestra existencia. Por ello fuimos ungidos el día de nuestro bautismo y confirmación y, de manera particular, mediante la unción e imposición de manos, fuimos fortalecidos el día de nuestra ordenación presbiteral y enviados a cumplir nuestra misión. 

 

Es evidente que se trata de un llamado a vivir un estilo de vida que implica una espiritualidad que está ligada al sacramento del Orden. Somos los primeros llamados en poner todo nuestro empeño para que resplandezca la luz de la Verdad sin ambigüedades. Sobre todo, los sacerdotes -como afirma el Papa Francisco- sin hacer ruido dejan todo para dedicarse a la vida cotidiana de las comunidades, dando a los demás su propia vida, "se conmueven ante las ovejas, como Jesús, cuando veía a las personas cansadas y agotadas como ovejas sin pastor".[1]

 

En el actual contexto, ante la situación de dolor, incertidumbre y soledad de muchos por la dura realidad que estamos viviendo por la pandemia, debe resonar la constatación del salmista cuando ora: "Él Señor libera a los cautivos, abre los ojos de los ciegos y levanta al caído; el Señor protege a los extranjeros y sustenta al huérfano y a la viuda; el Señor ama a los justos y entorpece el camino de los malvados" (146,7-9). «El Señor sana los corazones afligidos y les venda sus heridas [...] El Señor sostiene a los humildes y humilla a los malvados hasta el polvo? (147,3.6). Acompañemos valientemente a todos los aquí mencionados, y pidamos al Señor, porque, aquellos a quienes corresponda en el Poder Ejecutivo y Legislativo, den trámite pronto a las "DIEZ PROPUESTAS PARA ENFRENTAR LA CRISIS CAUSADA POR LA COVID-19 DESDE UNA PERSPECTIVA SOCIAL, PRODUCTIVA Y SOLIDARIA".[2]

 

Ante la emergencia sanitaria, económica y social, las respuestas han de darse desde la solidaridad, han de cambiar las estructuras económicas de dominio e insolidaridad. Este momento histórico nos da, como país, la gran oportunidad de corregir el camino recorrido en el egoísmo e individualismo.

 

Por otra parte, y dado que es un tema de absoluta vigencia, para nosotros siempre será una alegría anunciar la buena noticia del matrimonio entre un hombre y una mujer y la familia en él fundada. En la Iglesia, el mensaje de Jesús se impone a cualquier ideología.

 

Habrá quienes tachan a la Iglesia de intolerante por manifestar sus convicciones, pero, en un país de derecho, en el ejercicio del derecho a la libertad religiosa, podemos manifestar y enseñar a nuestros fieles conforme al Magisterio y el dato revelado. Apelamos a la tolerancia recíproca, al respeto mutuo, de frente a radicalismos de uno y otro lado. Prosigamos nuestra misión de ofrecer la luz a quienes no ven lo maravilloso de la propuesta que a todos nos hace el Señor.

 

Mi saludo y abrazo paterno a cada uno de ustedes sacerdotes, mis más estrechos colaboradores, los animo a seguir adelante dando muestras de entrega fiel a la misión que el Señor les ha confiado y a todos los fieles les invito a orar por nosotros sacerdotes. Tengamos paciencia en la espera de volver a encontrarnos celebrando gozosamente los sacramentos en nuestros templos. El Señor es nuestra única fortaleza en todo momento, nunca nos abandona, está siempre en nosotros.

 

 



[1] Papa Francisco. 13 de diciembre del 2019

[2] Consejo Presidencial de Economía Social Solidaria