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Papa

El niño que se escapó de su bautizo en la Sixtina

Papa Francisco bautizó 16 pequeños en el Vaticano

·         Santo Padre tranquilizó a los padres de niños inquietos en la Iglesia

 

David Mora, periodista

El pasado 7 de enero, en la Fiesta del Bautismo del Señor, el Papa Francisco presidió una Santa Eucaristía en la Capilla Sixtina donde administró el Sacramento del Bautismo a 16 niños, hijos de empleados del Vaticano. Uno de ellos era Romeo, un pequeño que se escapó de su bautizo para contemplar las pinturas del recinto religioso.

Romero es hijo de un matrimonio argentino, contemporáneo al Santo Padre; María Paz Jurado y Ezequiel del Corral, quienes tienen varios años de vivir en Italia al trabajar en el proyecto educativo Scholas, promovido por Francisco a nivel mundial. Ellos ya habían coincidido en otras ocasiones con el Sumo Pontífice, pero reconocen que vivieron un momento sobrecogedor al ver que el Papa estuvo presente en un momento tan íntimo y familiar, añadiéndole el hecho de que fuera en la Capilla Sixtina.

María comentó que el momento en el que Romeo se escapó "era un niño siendo niño justamente en ese contexto y en ese lugar tan majestuoso, tan formal". Aunque el pequeño no era el único que estaba inquieto durante la ceremonia, por lo que muchos padres intentaban mantener a sus bebés en calma, por lo que el obispo de Roma les recordó que los niños ahí debían sentirse como en casa porque eran los protagonistas.

"Si lloran, por el momento están en silencio, pero es suficiente que uno dé la nota para que comience "el concierto", dejadles llorar. Si tienen hambre, dadles de pecho, tranquilas, aquí", dijo el Santo Padre en su homilía.

"Yo me quedo con ese lindo mensaje que aparte a mí como mamá también fue un gran alivio porque los nervios que uno tenía de cómo se porta su hijo, un niño de un año y medio", manifestó Jurado.

Esta celebración fue realizada en italiano, pero al llegar el pequeño Romeo a la pila bautismal, Francisco aplicó una excepción y se dirigió a sus padres en su nativo español; sin embargo, entre los llantos del niño, Ezequiel y María no lo notaron y respondieron en italiano, tal como lo tenían predispuesto.

"Que alguien así bautice a tu hijo es lo más lindo. No se trata de que sea el papa, sino de que sea este papa...Y después nos retó de que le habíamos respondido en italiano: "¿Por qué me responden en italiano si yo lo dije en español?", pero es muy lindo pensar en el detalle y en la capacidad que tiene de estar siempre comprendiendo todo lo que va viviendo, en qué contexto, con quiénes. Esa memoria, esa cercanía de estar en medio de los más grande atento a lo más pequeño", contó el padre del niño.

Al finalizar el bautizo, Francisco entregó una candela a la familia y les pidió que la enciendan cuando pasen por momentos difíciles y con ella le pidan a Dios la paz para poder afrontarlos.

 

Fuente: Rome Reports.